La Organización Internacional para la Estandarización (ISO por sus siglas en inglés, International Organization for Standardization) ha publicado recientemente nuevas normas para la economía circular; en concreto las numeradas como 59004, 59010 y 59020.
La primera de ellas está “específicamente diseñada para promover la transición hacia una economía circular”, según la organización. Esta norma proporciona recomendaciones, define términos y conceptos clave, establece una visión de la economía circular, especifica principios fundamentales y ofrece recomendaciones para apoyar medidas concretas que favorecen la sostenibilidad.
La norma ISO 59004 es importante, dicen, porque “promueve un modelo de economía circular enfocado a la gestión sostenible y la renovación de los recursos naturales”. Por tanto, las organizaciones que la adopten pueden aportar soluciones más sostenibles” y por tanto contribuir a mitigar el cambio climático y aumentar la “resiliencia furente a la escasez de recursos”.
En cuanto a la norma 59010, que complementa la anterior, “se centra en estrategias orientadas a las empresas para aplicar prácticas de economía circular tanto a nivel organizativo como interorganizativo. Proporciona, dicen, “una orientación más detallada sobre la evaluación de los modelos actuales de creación de valor, la cartografía de las cadenas y redes de valor, y el desarrollo de estrategias de circularidad”.
Por último, la 59020 “es crucial en la transición hacia una economía más circular al proporcionar una metodología clara y estructurada para medir y evaluar el desempeño circular”. Por tanto, pretende ayudar a las organizaciones a identificar con qué eficacia están reduciendo el uso de recursos y optimizando el flujo circular de materiales.
Para las empresas, aseguran, “ofrece una forma de cuantificar el progreso y demostrar el compromiso con prácticas sostenibles, reforzando la transparencia, la responsabilidad y la confianza de las partes interesadas”.